viernes, 28 de mayo de 2010

Beneficios de aplicar un proceso de transparencia en las administraciones públicas

(Aquí teniu disponible el post original escrit en català)

Empecé a escribir este post en el AVE cuando regresaba de hacer una ponencia sobre indicadores web.

Este es un post que hace mucho tiempo que quería escribir, los últimos sucesos me han casi "obligado" a escribirlo.

De lo que quería hablar es de la transparencia en las administraciones públicas, aunque también se podría extender este concepto a cualquier organización, es perfectamente aplicable ya sea una organización pública como privada, ya sea de tamaño pequeño como mediana o grande.

Pero en el caso concreto del sector público creo que la transparencia no es sólo deseable, es imprescindible si queremos que el actual sistema democrático perdure tal como lo entendemos.

Soy consciente de que el acabo de decir es "muy gordo", quizá me he pasado... reconozco que lo he hecho para provocar, pero también es evidente que hay algo que no funciona bien.

Hay algo que no acaba de funcionar bien si se tiene en cuenta que en el último barómetro del CIS - el correspondiente a abril de este año - los políticos son el tercer problema más importante de España según la ciudadanía.

Es decir, el colectivo que en teoría debe resolver las necesidades de la gente, la ciudadanía lo percibe como una de las causas de sus males.

No vamos bien...

Además, los recientes casos de (presunta) corrupción (Casos Gürtel, Pretoria, Palau (Millet), etc) aunque alejan más la sociedad de los políticos, y, lo que es peor, también se alejan de la política.

Por si fuera poco la actual situación de crisis económica no ayuda a serenar los ánimos, sino todo lo contrario.

Por todo ello, y lo digo muy en serio, creo que hace falta un proceso de auténtica transparencia en nuestras administraciones públicas.

Un proceso que permita a cualquier ciudadano poder comprobar que realmente todo el mundo está jugando limpio.

Pero ¿qué entiendo por transparencia?




Hay muchas maneras de definir la transparencia en nuestras administraciones públicas, hay mucha literatura al respecto.

Para decirlo de forma sencilla, yo entiendo la transparencia como una forma de actuar de la administración pública en la que sus datos públicos se pone al alcance de la ciudadanía de forma efectiva.

Es una cuestión de forma de ser, no es un problema técnico.

Cuando hablo de dato público me refiero a toda información que no esté sujeto a alguna ley de privacidad, como los datos específicos de los ciudadanos del padrón municipal.

Y cuando utilizo la expresión "ponerlo al alcance de la ciudadanía de forma efectiva" quiero dejar claro que no es suficiente en colgarlo en el BOE, es necesario disponer la información de una determinada manera que permitirá sacar el máximo rendimiento de los datos.




Pero exactamente qué beneficios sacamos de un proceso de transparencia en la Administración Pública:
  1. Las administraciones públicas podrán rendir cuentas con la ciudadanía de una forma continua. Es la mejor manera de saber en todo momento dónde destinan los presupuestos de las administraciones públicas hasta el último céntimo. Por lo tanto, es una herramienta muy potente para luchar contra la corrupción.
  2. Consecuentemente, es una manera más de intentar recuperar el prestigio de la clase política, demostrando que la inmensa mayoría de los políticos son gente honesta. De esta manera no sólo se reitera con la honestidad de los políticos sino que, además, el ciudadano lo puede comprobar personalmente. (Hoy lo hablaba el MH Presidente Benach en el Avui).
  3. También es una muy buena herramienta para luchar contra la opacidad informativa y, sobre todo, para erradicar los grupos de poder basados en la información reservada: es una forma de universalizar más la información.
  4. Un proceso de transparencia de los datos públicos obliga a quien los genera a tener un control sobre ellos, dicho de otra forma, un proceso de apertura de la información pública provoca que se mejore la calidad y la eficiencia en la recopilación de los datos.
  5. Personalmente siempre he creído que la ciudadanía tiene una percepción errónea de la Administración Pública: "hace poco trabajo y lo hace mal" (por ejemplo, es evidente qué percepción tiene la ciudadanía sobre los funcionarios). Un proceso claro de transparencia dejaría claro el mucho trabajo que se hace en las administraciones públicas, no sólo es lo que percibe el ciudadano...
  6. Derivado del punto anterior, un proceso de transparencia mostraría a la ciudadanía qué coste tienen los servicios que ofrece la Administración, es decir, sería una manera de romper la percepción que los servicios públicos son gratuitos.
  7. También sería una buena manera que la ciudadanía se hiciera la idea de que la Administración no es infinita, también tiene límites, por lo tanto, es una manera de empezar a romper la visión de la Administración como aquella en la que siempre nos tiene que ayudar cuando tenemos problemas.
  8. También es una buena manera de mostrar que la crisis también está afectando a la Administración Pública. Ahora más que nunca, un proceso de transparencia permitiría a la ciudadanía saber dónde se destinan los (menguantes) dinero público.
  9. Un proceso de transparencia de datos es una nueva manera de generar riqueza, de hecho, en lugares donde ya se está empezando a aplicar, como por ejemplo en Estados Unidos, esto ya está ocurriendo.
  10. La transparencia es un paso imprescindible para conseguir una verdadera implicación de la ciudadanía en los asuntos públicos. No es el único paso pero sí que este es imprescindible para lograr un Gobierno Abierto (Open Gov), una forma diferente de entender a la Administración Pública que, personalmente, creo que es una solución al actual callejón sin salida.

Con todos estos beneficios ... por qué no lo estamos implementando en nuestras administraciones?
Y más cuando ya hay otras administraciones que lo están haciendo ... (USA, UK, Australia ... pero también de más cercanas como Euskadi).




¿Pero como implementamos un proceso de transparencia en la Administración?

¿Por dónde empezamos?

Es evidente que estamos en unos momentos donde la incertidumbre es dominante, estamos en un momento de cambios... por tanto, no esperemos a la situación ideal para empezar un proceso de transparencia.

Empezamos por un proceso de apertura de datos (Open Data) con aquellos conjuntos de información que sea más sencillo hacerlo:
  • Porque ya las tenemos digitalizadas, en el formato adecuado y con la calidad necesaria.
  • Porque políticamente no hacen daño.
  • Porque es un proceso que técnicamente ya está resuelto, este no es el problema y, además, económicamente tampoco es un problema.
Paralelamente tenemos que sacar un acuerdo de gobierno, tal como hizo el Barack Obama en su primer día al cargo de Presidente de los Estados Unidos. Una medida que obligue a todos los departamentos, direcciones, gerencias de la Administración a aplicar procesos de transparencia.

No hay que ser muy exigentes de entrada, y menos en tiempos de crisis... aunque precisamente porque estamos en tiempos de crisis es cuando es más necesario la transparencia.

Basta con poner los datos al alcance de la ciudadanía?

No. Hay que disponer los datos de forma usable, fácil de encontrar y fácil de usar. Además hay que fomentar que la ciudadanía sepa cómo utilizar esta información, que saque el máximo de jugo, que sepa cómo interpretar-la.

Hay que tener en cuenta que el objetivo no es poner los datos al alcance de la ciudadanía, el objetivo es que ésta pueda obtener las conclusiones que se derivan.

Un concepto clave es el cruce entre datos de diferentes administraciones, aquí radica un nivel de potencia muy interesante, hay que potenciarlo.

Por tanto, no sólo hemos de fomentar que se utilicen los datos de nuestra administración sino que, además, que se crucen con los datos de otras administraciones. Esto es especialmente útil en un estado como el nuestro con tantas administraciones públicas: Estado, Comunidades Autónomas, Diputaciones, Ayuntamientos, etc.



Con todas estas ventajas y viendo que técnicamente (ni económicamente) no es un problema, ¿por qué no lo implementamos?

Personalmente creo que básicamente es por desconocimiento de nuestros dirigentes políticos y, evidentemente, por miedo, miedo de lo que puede implicar un proceso de transparencia total...

Pero tarde a temprano tendrán que rendir cuentas con la ciudadanía, tarde o temprano se les pedirá explicaciones de por qué no promueven procesos de transparencia... en caso contrario se extenderá la idea de que efectivamente los gobiernos nos ocultan cosas : (


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4 comentarios:

Alorza dijo...

Marc, veo que estamos evangelizando con el mismo catecismo :-)

Ayer, en una charla que me tocó dar, pedí a los asistentes que se bajaran los pantalones. Nadie lo hizo. Cuando les dije que mi conclusión era que tienen problemas de transparencia, todos lo entendieron :-)

Y, sin embargo, la transparencia es imparable. La hoja de ruta que propones es sensata. Ánimo, que se puede hacer.

MarcG dijo...

Alberto,

Suerte que no contabas con Boris Izaguirre en el público... ;-)

Yo también creo que la transparencia es imparable en las AAPP, pero sin embargo, aún no es una realidad (excepto en contadísimas administraciones que sólo están un proceso muy primerizo).

Tal como he comentado en casa de Andrés, creo que uno de los frenos a dicha aplicación de transparencia total radica en la falta de valentía de nuestros políticos.

Siguen actuando como siempre, no se han enterado que estamos en un periodo de grandes cambios...

Anónimo dijo...

Creo que somos en exceso optimistas en ocasiones. El porqué no se implementa la transparencia de las AAPP no creo que sea por falta de desconocimiento, lo dejaría tan sólo en la segunda de tus opciones: Miedo.

También hay falta de voluntad. ¿Alguien puede explicar a que espera por ejemplo el INE para cambiar las condiciones de licenciamiento de sus datos?


Discrepo contigo en un punto: La transparencia si cuesta dinero. Poner los datos en formato presentable y reutilizable y llevarlos al front-office no es gratis. Hay que tratar de evitar caer en errores como el objetivo del 100% de los servicios en línea. Hay datos que merece la pena y deben hacerse públicos (presupuestos, gastos, ...) y otros que no salvo que los interesados paguen el coste de ello.

Sobre la transparencia, creo también que hay un tema que no tocas a fondo. La transparencia en el uso de los datos personales. Creo que ya va siendo hora que los derechos ARCO de la LOPD puedan ejercerse en línea en las AAPP.

MarcG dijo...

Andrés,

Efectivamente uno de los problemas de fondo es la ausencia de voluntad en querer implementar un proceso de transparencia.

Pero yo creo que esta ausencia de voluntad proviene de un desconocimiento o de miedo (o ambas).

Quizá soy muy ingenuo - seguro! - pero creo que la inmensa mayoría de dirigentes del sector público no actuan de mala fe. Por ello la única explicación que encuentro a esta falta de interés por la transparencia proviene del desconocimiento o del miedo.

Es cierto que aplicar la transparencia tiene un coste, no es gratis...

Pero los beneficios superan - con creces - la inversión realizada y, además, siempre he predicado que hay que tener sentido común (en Catalunya diríamos 'seny'): tal como comentas, en algunos ámbitos ser transparentes no aporta nada o casi nada.

Una de las ideas que he querido transmitir en el post es de no esperar a tenerlo todo controlado y todo estudiado... empecemos a ser transparentes en ámbitos más sencillos, más controlados o los que requieren menos inversiones y, con paso firme, vamos ampliando la transparencia hacia el resto de sectores.

Pero por favor, no caigamos en el error de esperar la situación ideal... cuántos proyectos he visto que no han tenido éxito por este motivo :(

Por otro lado en el post no comento nada de la transparencia en los datos personales pq. es un ámbito que, admito, aún no tengo una postura clara.

Gracias por tu, como siempre, excelente comentario.